MESA REDONDA
Es la presentación de
diferentes puntos de vista, no necesariamente contradictorios, acerca de un
tema determinado, ante un público y con la ayuda de un moderador. A diferencia
del debate, en la mesa redonda se busca fomentar el diálogo entre los
participantes para desarrollar el tema desde diferentes áreas o puntos de
vista. Por ello, este tipo de género oral es el ideal cuando se quiere abordar
un tema a fondo sin caer necesariamente en el esquema del debate. De manera
general, las mesas redondas se utilizan como complemento de congresos o ciclos
de conferencias, con la intención de profundizar en temas específicos.
La mesa redonda está integrada
por un moderador, los participantes y el público. El moderador tiene la función
de dirigir, organizar, presentar y cerrar la mesa redonda; este debe buscar que
la información, expuesta por los participantes, se complemente abarcando un
panorama mucho más amplio. Cada uno de los participantes tiene la función de
exponer un aspecto sobre el tema elegido que despierte el interés y ayude a una
mayor comprensión del tema, tanto por parte del público como por el resto de
los participantes. Finalmente, el papel del público se limita a una sesión de
preguntas que, generalmente, se realizan al concluir la exposición de cada uno
de los participantes de la mesa redonda.
La estructura de la mesa
redonda está sujeta a reglas previamente determinadas por los participantes y
el moderador; sin embargo, de manera general, la mesa redonda consta de cuatro
fases: la presentación e introducción, el cuerpo de la discusión, la sesión de
preguntas y respuestas y la conclusión.
La presentación de la mesa
redonda está a cargo del moderador, quien introduce el tema así́ como presenta
a cada uno de los participantes. Por su parte, el cuerpo de la discusión está
a cargo de los participantes, y es donde se exponen los diferentes
acercamientos previamente preparados sobre el tema elegido. Cada participante
interviene con un texto o exposición oral preparada con anticipación. Estas
intervenciones se dan de manera organizada y con el tiempo que administra el
moderador. Finalmente, la sesión de preguntas y respuestas, así́ como la
conclusión, cierran la mesa redonda, y su función es tanto aclarar dudas como
resumir y relacionar lo expuesto por cada uno de los participantes.
¿Cómo
se realiza?:
Preparación:
Una
vez decidido el tema o cuestión que desea tratarse en la Mesa Redonda, el
organizador debe seleccionar a los expositores de los distintos puntos de
vista, de acuerdo con los requisitos ya expuestos. Se hará una reunión previa
con los participantes con el objeto de coordinar el desarrollo, establecer
orden de exposición, tiempo, temas y subtemas por considerar, etc. La Mesa
Redonda requiere esta preparación, a pesar de que en su desarrollo público se
manifieste luego una situación espontánea.
El
organizador debe prever asimismo el ambiente físico donde tendrá lugar la Mesa
Redonda, el equipo, los horarios, las invitaciones, etc. Los miembros de la
Mesa Redonda deben estar ubicados en un escenario donde puedan ser vistos por
todo el auditorio. Generalmente el coordinador se sienta en el centro, detrás
de una mesa amplia, y los expositores a su derecha e izquierda formando los
respectivos "bandos" de opinión:
Desarrollo:
1. Ubicados
en el escenario los participantes, el coordinador abre la sesión con palabras
iniciales, mencionando el tema por tratarse, explica el procedimiento que ha de
seguirse, hace la presentación de los expositores agradeciéndoles su
cooperación, comunica al auditorio que podrán hacer preguntas al final, y
ofrece la palabra al primer expositor.
2. Cada
expositor hará uso de la palabra durante 10 minutos aproximadamente. El
coordinador cederá la palabra a los integrantes de la Mesa redonda en forma
sucesiva, y de manera que se alternen los puntos de vista opuestos o
divergentes. Si un orador se excede demasiado en el uso de la palabra el
coordinador se lo hace notar prudentemente.
3. Una
vez finalizadas las exposiciones de todos los participantes, el coordinador hace
un breve resumen de las ideas principales de cada uno de ellos, y destaca las
diferencias más notorias que se hayan planteado. Para ello habrá tomado notas
durante las exposiciones.
4. Con
el objeto de que cada expositor pueda aclarar, ampliar, especificar o concretar
sus argumentos y rebatir los opuestos, el coordinador los invita a hablar
nuevamente durante unos dos minutos cada uno. En esta etapa los expositores
pueden dialogar si lo desean defendiendo sus puntos de vista.
5. Minutos
antes de expirar el plazo previsto, el coordinador da por terminada la
discusión y expone las conclusiones haciendo un resumen final que sintetice los
puntos de coincidencia que pudieran permitir un acercamiento entre los diversos
enfoques, y las diferencias que quedan en pie después de la discusión.
6. El
coordinador invita al auditorio a efectuar preguntas a los miembros de la mesa
sobre las ideas expuestas. Estas preguntas tendrán sólo carácter ilustrativo, y
no se establecerá discusión entre al auditorio y la mesa. Las personas del
auditorio tendrán derecho a una sola intervención.
Sugerencias
prácticas:
· El coordinador ha de ser imparcial y objetivo
en sus intervenciones, resúmenes y conclusiones. Tendrá agilidad mental y
capacidad de síntesis, y será muy prudente en el tiempo que tome para su
participación (lo importante en la Mesa Redonda es conocer las ideas de los
miembros invitados).
· El coordinador debe ingeniarse para
desalentar cordialmente las intenciones polémicas de algún integrante del
auditorio. De la mejor manera posible insistirá en aclarar que las preguntas
del público no deben convertirse a su vez en "exposiciones" sobre el tema,
y que una vez contestadas no deben llevar a la discusión.